4 consejos para pedir un aumento con éxito

4 consejos para pedir un aumento con éxito

Un error muy común es pensar que los empleadores siempre recompensan el buen trabajo. Lamentablemente, pedir un aumento no es tan sencillo como decir: “He hecho X e Y, así que creo que merezco un aumento”. Cuando lo planteas así, es probable que escuches una excusa como: “No hay presupuesto”.

Pero lo más importante es que pedir un aumento nos hace sentir incómodos a la mayoría de nosotros. ¿Cómo se hace la pregunta? ¿Cómo te preparas? ¿Qué haces cuando tu jefe dice que no?

La pregunta más importante que debemos hacernos es: ¿por qué debería recibir un aumento? La gerencia no debería recompensar a los empleados mediocres solo porque tienen una larga trayectoria laboral.

Si quieres aumentar tu sueldo, debes demostrar que aportas valor a la empresa. Este es el único requisito para pedir un aumento: aportar valor añadido. ¿Sientes que aún no puedes demostrar tu rendimiento? Entonces no pidas un aumento.

Pero si ha demostrado un rendimiento superior al promedio en los últimos 6 a 12 meses, no lo dude. A continuación, le presentamos cuatro prácticas recomendadas que mejorarán sus posibilidades de obtener un “sí”.

1. No le preguntes a tu gerente durante la revisión anual

Casi todas las personas con las que me encuentro creen que el momento perfecto para pedir un aumento es la evaluación anual. Esperamos que nuestro gerente reconozca el excelente trabajo que hemos realizado, lo que no sucede automáticamente.

Además, es probable que tus compañeros también piensen que es el momento perfecto para pedir un aumento. Eso significa más competencia, algo que no quieres. La mayoría de las empresas destinan un presupuesto para aumentos; una vez que se acaba el presupuesto, tus posibilidades también se acaban.

2. ¿Cuándo debería programar una reunión?

Averigua cuál es el mejor momento para hablar sobre tu salario. Simplemente pregúntale a tu gerente: “¿Cómo y cuándo se discuten los aumentos?”. Esa es la manera perfecta de comenzar la conversación sobre el salario.

Algunas personas piensan que es demasiado directo, pero no hay nada de malo en preguntar sobre el proceso de obtención de un aumento cuando estás aportando valor a la empresa. Una vez que hayas descubierto cuándo deberías tener la conversación, programa una reunión.

Diga: “Me gustaría sentarme con usted para hablar sobre cómo podemos defender la idea de revisar mi salario”.
Comuníquele a su gerente que están trabajando en esto juntos. Recuerde: su jefe debe ser su aliado.

3. Presentar un caso sólido

Puedes construir un caso fácilmente si llevas un diario o un archivo de tus logros. A menudo nos olvidamos de registrar el valor que aportamos a nuestro empleador o cómo nos hemos desarrollado. Si no has registrado tus logros en los últimos 12 meses, este es un buen momento para empezar a hacerlo.

Puedes hacerlo fácilmente si escribes lo que has logrado y lo que dicen de ti tus compañeros o clientes. Comunicarle esa información a tu jefe es esencial. No debes dar por sentado que tu jefe sabe exactamente todo lo que has hecho por la empresa.

Tu caso debe ser una combinación del valor añadido que aportas a la empresa y las habilidades que has desarrollado. Un empleador no solo debe preocuparse por los resultados, sino también por tu desarrollo.

Cuando tengas la reunión, prepárate para explicar por qué mereces un aumento. Puedes ser directo.

Uno de mis amigos recientemente logró que le dieran un aumento. Dijo: “El año pasado superé mi objetivo en un 150 % y fui mentor de dos nuevos colegas. Me gustaría hablar sobre un aumento que refleje lo que he estado haciendo”.

4. Si recibe un no: elabore un plan mutuo

Prepárate siempre para lo peor. Puede que te digan que no, pero eso no es importante: pedir un aumento es una situación en la que todos salen ganando. Si rechazan tu solicitud, puedes preguntar: “¿Qué se necesita para ganar un aumento de sueldo en el futuro?”. Junto con tu gerente, puedes determinar qué se necesita para obtener un aumento. Ahora, puedes trabajar para cumplir con los requisitos.

Una vez que hayas cumplido con todas las condiciones acordadas, puedes volver a preguntar. Al adoptar este enfoque, te asegurarás de comprender bien el procedimiento de tu empresa en materia de aumentos y promociones.

La próxima vez que presente su solicitud, tendrá más argumentos porque completó los trámites necesarios para obtener un aumento. Cuando le vuelvan a decir que no, podría significar que la estructura de la empresa no es la adecuada. Eso no significa que deba amenazar con irse, pero debe pensar si su carrera profesional sigue avanzando en su empresa.

¿Qué tipo de aumento puedes esperar?

El aumento promedio es del 3%. Sin embargo, según mi experiencia, no es improbable que haya aumentos de hasta el 5%. Pero los números no deberían ser tu principal motivación. Después de todo, el dinero no compra la felicidad. Las investigaciones de Daniel Kahneman y Angus Deaton demuestran que el dinero extra no te hace más feliz. Lo que sí te hace más feliz es progresar en tu carrera al obtener un salario que se ajuste a tu valor.

Tony Robbins lo expresó mejor: “La felicidad es igual a progreso”.

La conclusión es que nunca lo conseguirás si no lo pides. Cuando dejes de lado el miedo y tengas una conversación abierta con tu jefe, verás que no es tan malo. No dejes que el miedo al rechazo te detenga. Incluso cuando recibas un no, tendrás suficiente con lo que trabajar para poder conseguir lo que quieres más adelante.